Esa cara que traigo en la foto es la de asombro al ver la de tonterías que escriben en Tuita, que terminarán perdidas como lágrimas en la lluvia. En cambio yo selecciono las
He aquí la selección del Año del Señor 2022 (y no les digo de qué señor)
Así pintaba el año
Anoche, la Señora Peñafiel y yo lanzamos las
monedas del I Ching para ver qué depara 2022. A México como país le salió el
hexagrama 41; al presidente López Obrador, el hexagrama 28.
Parece que se nos cebó el viaje a San
Petersburgo que teníamos planeado la Señora Peñafiel y un servidor para esta
primavera. Le propondré un viaje a San Pedro Actopan.
Ya conseguí asilo en casa de un amigo en La
Paz, Bolivia, en caso de apocalipsis nuclear. Eso sí, le pedí que nos inscribiera
a su club, para nadar mientras el mundo se cae a pedazos.
Resabios de la pandemia
-¡Esto no sabe a nada! ¡No la friegues, perdí el sentido del gusto! ¡Tengo Covid!
-No te preocupes, es tofu.
Los defensores presidenciales
“Cuatro patas, bien. Dos piernas, mejor”
Es mi resumen de los tuits en defensa del Presidente, de su hijo y de plagiarios varios.
Ya entendí. Hablar de la casa de Houston y los
negocios de Vidanta es “oponerse a todas y todos los ciudadanos que buscan la
justica (sic) y la igualdad social”.
No procede la queja contra Gertz porque no fue
el autor quien lo demandó de plagio. Procedo entonces a escribir El Capital.
¿Por qué no poner una estatua de la palma en
la glorieta de la palma? Sería ideal para después del homenaje. Como en La
Oveja Negra, de Monterroso.
Analizando las cosas del país, llegó a una
conclusión: la cosa es grave, pero no seria.
-¡Esto no sabe a nada! ¡No la friegues, perdí el sentido del gusto! ¡Tengo Covid!
-No te preocupes, es tofu.
“Cuatro patas, bien. Dos piernas, mejor”
Es mi resumen de los tuits en defensa del Presidente, de su hijo y de plagiarios varios.
Estaba yo en Nueva York. Corría 1969. Que me invitan a un “pot party”.
Respondo:
-Nah! Those Tupperware affairs are a big bore!
Hoy la luna parece el gato de Cheshire.
Nadie le dio like a mi tuit.
Los jóvenes de hoy ven a la generación del 68 como en 1968 los jóvenes veían a los veteranos de la Revolución: unos viejillos anclados al pasado remoto, del que cantaban sus glorias.
La distancia en el tiempo (2022/1968/1914) es la misma.
Platica una gringa.
-Me encantan los diminutivos que usan los mexicanous, por ejemplo mi hijou se llama Gonzalo y le decimos Chalito.
-¿Y su hija?
-Se llama María Francisca y le decimos Panochita.
-¡Panchita! -la corrige el marido.
-¡Oh sí! Panchita.
Propongo un jueguito. El bibliotecario tarado. Imaginemos un bibliotecario que se toma las cosas literales y por ello clasifica mal los libros.
Empiezo:
Las Viñas de la Ira, en la sección Vinos
Cada cosa es Babel. Y Dios, el de la mano sin pulgares, nos habla en un idioma incomprensible. Adiós, Lizalde.
Al ritmo que van para atrás, los gringos van a conocer a Robert E. Lee.
La muerte de Echeverría ni nos beneficia ni nos perjudica, sino todo lo contrario.
Me gustaba mucho jugar con mis bolas. Ahora juego poco, por la edad. Me gustaba acercar la nariz para olerlas. Y darles su sobada para quitarles la pátina. Me dolía si otros les daban un tablazo. Y me gustaba que cayeran en manos de un compañero. Mis bolas tienen 108 costuras.
Si vas a versificar
haciendo calaveritas,
primero aprende a rimar
pa’ que te salgan bonitas.
y en los acentos fijarte.
Aunque sea para jugar,
hay que respetar el arte.
México-Argentina, en el Mundial de 1930, bien presente tengo yo. El Diente Rosas cubre a Varallo; atrás, el Trompo Carreño y su inseparable gorrita. Le metimos 3 goles a la albiceleste. Dos del Diente Rosas y uno de la Pulga Gayón.Pero ellos nos clavaron 6.
Nos va a ir mejor en el Mundial de curling que
en el de futbol, dije en octubre.
Y en noviembre:¿Qué les dije? Dos victorias en curling, sólo una en futbol.
Y en noviembre:¿Qué les dije? Dos victorias en curling, sólo una en futbol.
¿Dónde está el técpatl, el sagrado cuchillo de pedernal con el que le sacaremos el corazón al Tata Martino?
Esta tragedia sólo se lava
viendo esa sangre caer pirámide abajo.
Un premio necesario
Ahora que don Eduardo Matos recibió el Premio Princesa de Asturias en Ciencias Sociales, me acordé de un tipo que merece el Princesa de Asturias... en Ingratitud. Y eso, porque otro le ganó el Nobel.
Epílogo
El juego es el opio de los niños.
Ahora que don Eduardo Matos recibió el Premio Princesa de Asturias en Ciencias Sociales, me acordé de un tipo que merece el Princesa de Asturias... en Ingratitud. Y eso, porque otro le ganó el Nobel.
El juego es el opio de los niños.